Tras el regreso a la presencialidad de millones de estudiantes peruanos, uno de los temores más comunes es el contagiarse de COVID-19.
Estudiantes, padres de familia y docentes han mantenido una lucha constante, los últimos dos años, para evitar infectarse del COVID-19; cumpliendo y respetando las normas exigidas por el gobierno peruano para frenar la expansión del virus. En la actualidad, con el retorno progresivo a la presencialidad, es imposible no tener en cuenta que podría existir un temor al contagio provocado por las múltiples muertes registradas en el país y en todo el mundo a causa de la pandemia.
En el primer capítulo de la tercera temporada de la serie Fortaleciendo Habilidades Socioemocionales, la especialista y psicóloga educacional, Pilar Sanz, brindó recomendaciones puntuales a docentes para aprender a lidiar con el miedo al contagio del COVID-19.
Un miedo natural
Según Pilar Sanz, tenerle miedo al coronavirus es completamente normal. Este sentimiento empeora cuando las personas perciben el contagio como «una amenaza silenciosa de portadores asintomáticos» ya que «nos resulta mucho más difícil confiar en la de los demás«.
Hay que recordar que el miedo es una de las emociones básicas del ser humano y tiene una función adaptativa, pues nos permite estar alertas y prepararnos ante distintos peligros. Por ello, según la especialista, es importante aprender a crear condiciones para confiar en las prácticas de cuidado, no solo en las propias, sino en las colectivas.
«El reto consiste en trasladar la sensación de confianza y espacio seguro que hemos construido en casa, a la escuela, convirtiéndola también en un espacio seguro para todos«, agrega la psicóloga educacional.
Conocer el panorama de la pandemia
Otro factor importante a tener en cuenta, no solo en la escuela sino también en el aspecto social, es saber reconocer e identificar las condiciones, el panorama de protección y el riesgo respecto al retorno a clases.
«¿Quiénes están ya vacunados?, ¿qué hábitos y prácticas cotidianas tomas para cuidar de ti y de otros?, ¿qué medidas se están planteando en tu escuela?, ¿qué condiciones posee o carece el colegio para lograr cumplir con los protocolos de bioseguridad establecidos?; estas son algunas preguntas que ayudan a reflexionar sobre las condiciones de protección y riesgo durante el retorno a clases«, dice Sanz.
Además, tener en cuenta las medidas que se han venido estableciendo estos últimos meses para frenar la expansión de la pandemia del COVID-19 en el país, es fundamental. Conocer los avances de la vacunación en el Perú, la efectividad de las dosis y los protocolos de bioseguridad exigidos en el transporte público brindará mayor seguridad al docente, según explica la especialista.
Espacio de confianza
Por otro lado, fomentar el cuidado mutuo y responsable entre todos los integrantes del centro educativo facilitará a que todos compartan un mismo clima de confianza en sus áreas de trabajo. Para lograr esto, es necesario expresar las preocupaciones relacionadas al virus con los colegas, conversar con las autoridades, entender las limitaciones de la escuela, establecer acuerdos mutuos y reforzar la forma en la que se irán aplicando estas medidas durante el año.
Finalmente, es sumamente importante que el docente tome una postura empática frente a los estudiantes, padres de familia y colegas que se sientan realmente afectados por la pandemia y que podrían experimentar situaciones de ansiedad o pánico.
«Para favorecer el cuidado y mitigar la posibilidad del contagio, es necesario tomar acciones preventivas, pero, ante todo: que sean colectivas. La capacidad del ser humano para co-regular su comportamiento, permite que la red institucional sea más efectiva y genere más protección frente a los efectos nocivos de la pandemia«, concluye Pilar Sanz.