En medio de la segunda ola del coronavirus, cuando vemos en las noticias que el oxígeno escasea y que hace falta una solución para brindar la atención necesaria a los pacientes de COVID-19, la Fundación Wiese entregó a ESSALUD 40 dispositivos Wayrachi. Estos son equipos de alto flujo de oxígeno que proporcionan a los pacientes que han desarrollado el coronavirus, la recuperación que urgentemente necesitan.
Esta nueva donación se suma a los veinte dispositivos que Fundación Wiese ya había entregado a ESSALUD hace semanas atrás. Al respecto, Fernando Sato, el vocero de Wayrachi, comentó: “Uno de los principales objetivos de Wayrachi es evitar que un paciente sea entubado y que no tenga la necesidad de la ventilación mecánica invasiva. El segundo objetivo, es retardar la necesidad de una unidad crítica en los minutos, horas o días. Estos dispositivos están soportando una buena proporción de pacientes que llegan a emergencias”, sostiene Sato.
Ingrid Claudet, gerente general de la Fundación Wiese, comentó que hasta el momento se han entregado 60, de los 100 dispositivos que la organización ha planeado donar a ESSALUD y que los dispositivos restantes serían entregados a medida que se vaya concluyendo su producción, en las diferentes redes de salud. Asimismo, mencionó que la importancia de estos equipos recae en que contribuyen a descongestionar las UCI, alivian la carga de los intensivistas, además de que pueden ser instalados fuera del área de cuidados intensivos.
“Para los pacientes que reciben este tratamiento también es positivo, porque estos no dejan las secuelas que sí ocasionan los ventiladores mecánicos”, señaló Claudet.
Durante la entrega de los dispositivos estuvo presente Fernando Sato, uno de los tres ingenieros mecánicos que forman parte del equipo que ha dado vida a Wayrachi. Sato contó que los dispositivos que son producidos por su equipo fueron desarrollados por Mercedes Benz y la Universidad UCL Ventura el año pasado, y que debido a la coyuntura, fueron puestos a libre disposición de cualquier persona que quisiera replicarlos; así fue como Wayrachi se puso en contacto con los dueños de las patentes para iniciar la fabricación en Perú.
Los dispositivos, según indica Sato, tienen funcionamiento totalmente mecánico, por lo que solo requieren un punto de oxígeno a presión de más de 45 a 60 PSI. Estos pueden ofrecer un flujo de oxígeno de 0 a 100 litros por minuto a un porcentaje de 30 a 100%, los cuales son graduados a través de sus perillas. A la fecha ya se vienen fabricando más de 500 reguladores de oxígeno de Wayrachi que han sido entregados entre ESSALUD, MINSA, el Hospital de la Policía y el Hospital Naval. La Fundación Wiese es parte de las empresas que han contribuido con estas donaciones que, en las próximas semanas, completarán las 100 unidades.