La educación ambiental es un método que se está implementando en diversos colegios del mundo y es parte de las distintas actividades de la UNESCO para fomentar la conciencia ambiental en los niños, pues ellos son el futuro de nuestra sociedad. De esta manera se plantea implementar hábitos que fomenten el reciclaje y otros sistemas responsables en la educación primaria ya que más adelante, cuando los niños se conviertan en adultos, podrán tomar decisiones que incluyan el uso racional de los recursos.
Dentro los extensos módulos que comparte la UNESCO, se podrán encontrar diferentes actividades y maneras de incentivar el reciclaje en los niños dentro y fuera de las aulas, ya sea jugando, creando dispositivos que faciliten sus vidas, dibujando, etc. Sobre estos mismos puntos, presentamos 4 ideas que pueden ayudarte a motivar a tus alumnos o hijos a reciclar y a cuidar el medioambiente.
Triturando tarros de aluminio
Este ejercicio se basa en la reducción de desechos: reciclando los tarros para luego reducir su volumen y que así no ocupen mucho espacio. Sería interesante que los alumnos traigan la mayor cantidad posible de tarros que no usen en casa o hagan una recolección en el colegio.
Los materiales que se usarán para esta actividad son: Pedazos de madera, clavos, tubos de plástico o metal y magnetos. Lo primero que se debe hacer es construir una caja cuadrada con las maderas, lo suficientemente grande para colocar un tarro de lata dentro. Por otro lado, otro pedazo de madera debe calzar justo dentro de la caja, ya que este será pegado a una varilla en forma de “T”, puedes usar también el tubo de plástico para hacerlo. Coloca un tarro dentro de la caja y usa el émbolo para aplastarlo.
Separando los desechos
Esta actividad sirve para que los niños empiecen a tomar decisiones a partir de su propia experiencia pues usarán sus propios desechos para conocer que ciertos elementos pueden ser reusados o reciclados. Los materiales que se utilizarán son: baldes grandes, bolsas de plástico, balanzas y guantes de goma. En primer lugar, los niños deben colocarse los guantes y otros implementos para su seguridad. Luego de esto, los pequeños deben identificar aquellos objetos que podrían ser reciclados o reusados. Tienen que separarlos y luego decidir sobre cómo podrían ser usados (abono, bancos de botellas, etc.)
Registrando hábitos de la comunidad
Los materiales para esta ocasión son: Block de notas, lapiceros y reglas. Cada niño debe empezar un registro. Con ayuda de su regla debe dibujar seis columnas en el papel a manera de tabla, que contenga las palabras: muy bueno, bueno, neutro, malo, muy malo y no sé. Hacia un costado de la misma hoja deben escribir el tema que será analizado por ejemplo, el uso del agua en el colegio, los restos de los alimentos, la iluminación del salón, el uso del papel, en relación con su comunidad, colegio o lo que decida el profesor.
Sería de mucha ayuda que dividan a todos los niños en grupos para que cada uno se ocupe de un solo tema así podrán anotar datos más específicos. Lo que se busca con este ejercicio es que ellos sepan si se está implementando el cuidado y el reciclaje en su colegio, comunidad o casa y que pueden tomar acción para empezar a hacerlo.
Difundiendo el mensaje del cuidado
Tal y como lo menciona el subtítulo, el principal propósito de esta actividad es que los niños difundan el mensaje de cuidado de medioambiente y el reciclaje. Los materiales son simples pero importantes: Regla, lápices de colores, pintura, revistas, tijera, cartulina y cualquier elemento para decorar sus carteles.
Cada niño debe redactar una pequeña propuesta para su trabajo antes de comenzar, que ellos decidan si harán un folleto, un póster o un triptico pero este debe contener el mensaje de manera que todos lo puedan entender. Por último, cuando todos los trabajos estén listos, los niños deben exponer sus proyectos y colocarlos en el periódico mural del colegio.
Fuente: UNESCO – Actividades de Educación Ambiental para escuelas primarias